Diez años de Dafni Girls: El sueño que se hizo realidad by Dafni Cocó

 

¿Cómo se explica un día tan soñado como el décimo aniversario de Dafni Girls?

La verdad… no lo sé. O al menos, no sé si las palabras pueden abrazar todo lo que sentí ese día. Lo que sí sé es que, de repente, me di cuenta de que habían pasado diez años. Diez años volando. Como si los hubiera soñado.

Recuerdo que en el vídeo lo dije claramente: la historia de Dafni es también la historia de una niña que se hizo adulta. Una niña que creció dentro de una comunidad, dentro de un sueño…que con el tiempo se convirtió en un sueño compartido. Lo que empezó como una pequeña aventura casi sin darme cuenta, dejándome llevar por la vida se transformó en un espacio único para el crossdressing, para chicas trans que comienzan su transición, para quienes buscan reencontrarse con su feminidad…o simplemente expresarla con alegría y libertad.

Dafni Girls nació oficialmente en 2015, cuando decidí mudarme a Madrid con una intuición muy clara: quería crear un estudio de crossdressing abierto al mundo. Un lugar donde no solo te maquillas o te vistes diferente…sino donde te reconoces. Dónde puedes empezar a dar forma a lo que ya llevas dentro. Donde coloreas, dibujas, te descubres y te celebras.

Y ese día, el del aniversario, sentí que todo eso había valido la pena.

Estaban ahí muchas personas que deseaba ver. Algunas a las que no había abrazado en años. Otras que han sido parte fundamental de esta historia. Quise reunir a todas las personas que, de una forma u otra, han pasado por mi vida a través de Dafni Girls. Porque sé que, sin un motivo tan especial como este, muchas veces no encontramos el momento. Por eso sabía que este día tenía que suceder, tenía que celebrarse, tenía que ser real. Y lo fue.

Fue tan rápido…A veces todavía me cuesta procesarlo.

Lloré muchas veces imaginando ese día, soñándolo, abrazando mentalmente todo lo que significaba. Lloraba de emoción, de gratitud, de felicidad profunda. Porque al final, la vida es eso: momentos que se quedan para siempre. Huellas que dejamos. Misiones que sentimos en el alma, aunque nadie nos las haya impuesto, y que simplemente sabemos que son nuestras.

Siempre sentí que esta era la mía.

Que Dafni Girls era uno de esos proyectos para el que había nacido, ese regalo que la vida me dio para compartir con el mundo. Y quería celebrarlo como tal, como algo irrepetible, porque sabía que este tipo de momentos no vuelven. Que lo importante no era solo lo vivido en ese día…sino todo lo que había detrás: diez años de lucha, de reinvención, de sonrisas, de estrés (¡mucho estrés!), de perfeccionismo, pero también de pura magia y de alegría compartida con tantas almas bonitas.

Si pudiera escribir los nombres de todas las personas que me han hecho crecer en este camino…no acabaría nunca, porque cada una, cada mirada en el espejo, cada historia que me confiaron…me hizo ser quien soy hoy.

Ese día, frente a todas ellas, lo dije claro: Dafni Girls es mi vida.

Y lo sigue siendo. Es parte de mi historia y la de muchas, y a la vez, una de mis misiones. Es ese lugar que quiero cuidar, mimar y mantener vivo mientras siga siendo necesario en este mundo. 

Y ahora que ya no camino sola, que puedo hacerlo con un equipo hermoso a mi lado, tengo más fuerza que nunca para seguir adelante. Para expandirnos. Para abrazar el mundo desde este rinconcito de libertad y transformación.

Dejar un legado. Que otras personas puedan sentir lo que yo he sentido. Que se sientan acompañadas, vistas, celebradas. Ese es el mayor regalo que me puedo llevar.

El aniversario fue una fiesta, sí, pero sobre todo fue un reencuentro. Con el pasado, con mis sueños, con personas a las que no veía hace años y que ahí estaban, como si el tiempo no hubiera pasado. Y también fue una promesa. Una promesa a mí misma de seguir, de no rendirme, de seguir creyendo que este espacio que nació casi como un juego es en realidad una necesidad profunda para muchas personas.

Ese día pasó tan rápido que apenas lo procesé, estaba en una especie de shock emocional, pero un shock bonito. De esos que te dicen que lo lograste. Que creaste tu lugar en el mundo. Que los sueños existen. Que los objetivos se cumplen. Y que cuando se hacen desde el corazón…brillan.

Hoy me quedo con eso. Con la certeza de que todo lo vivido ha merecido la pena.

Con la esperanza de que Dafni Girls siga siendo hogar, espejo y alas para muchas. Y con un deseo profundo de seguir caminando a vuestro lado.

Y es que a veces la vida te regala días que parecen sueños…

Con mucha luz,

Dafni Cocó.